
El Cross Country Día de la Memoria fue un éxito en cuanto a la convocatoria de corredores y corredoras de Olavarría y otros puntos de la región.
Sin embargo, es de público conocimiento que la organización fue víctima de un sabotaje que perjudicó a algunos atletas, especialmente a quienes marchaban como líderes hasta determinado momento de la competencia y debieron resignarse a finalizar retrasados en la clasificación.
Durante el mismo desarrollo del Cross, el doctor Iván Recabarren, referente del Círculo de Atletas Veteranos de Olavarría (CAVO) que había estado a cargo de la demarcación del recorrido, advirtió sobre las complicaciones que estaban sucediendo a raíz que algunas marcas estratégicas habían sido quitadas intencionalmente por manos anónimas.
No fue un descuido, no fue casualidad, ni fue una travesura de chicos que pasaron por el Cerro Largo en esas horas. Fue la mala intención de alguien, o de algunos, que sabían bien lo que hacían: las marcas que quitaron fueron las ubicadas en un punto estratégico del circuito.
La maldad no terminó ahí. Una vez finalizada la Carrera, tiraron las bolsas rojas que oficiaban como marcas a la vista de todos, intentando ensuciar el lugar y la imagen de nuestro Sindicato de Trabajadores Municipales de Olavarría.
El hecho, en investigación, no nos hará bajar los brazos.
Lamentamos las complicaciones sufridas por los participantes y los vecinos de la zona, y condenamos enérgicamente este ataque que no tiene como víctima a la organización sino a la sociedad en general por haber ocurrido un 24 de marzo, en el Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia, por intentar opacar un sentido homenaje a las víctimas de la última dictadura cívico militar.